Esa noche casi no pude dormir. No acepté entrar en ninguna carpa pues resultó que entodas habían roncosos: 3 en la de varones, 1 en la demujeres y los dos guías en la suya. No jodan, yo dormí en la silla. Luego acomodé cuatro e hice una improvisada "cama" (si es que así se le puede llamar)., y me dormí en eso, o bueno, eso intenté.
Me desperté a la 1 y media de la madrugada, el frío me mataba y así no podría dormir. Estuve así, hechado sin hacer nada, durante media hora, luego me levanté y di vueltas al rededor de todo lo que había allí para calentarme... nada, seguía sintiendo frío. Me empezaba a preocupar, pues si mi temperatura seguía bajando así me daría una hipotermia (y eso no es nada bueno).
Mientras me preocupaba y determinaba que mi temperatura interna ya estaba debajo de los 37,6 grados que acostumbraba tener (me sentía apenas a 37) algo me interrumpió... resultó que Nathaly salió de su carpa pues no le dejaban dormir los ronquidos de Katushca, y encima de todo los del lado opuesto le quitaban la frazada y no tenía con qué abrigarse...
Luego de discutirlo buen rato, decidimos que nos meteríamos en su carpa a dormir (no había de otra), aprovechando que de milagro Katushca había dejado de roncar. Y así pude dormir, al menos hasta las 6 de la mañana.
Me levanté como a las 6 y media. Di algunas vueltas, pero seguía haciendo frío. Luego de un rato, Raúl despertó, era el más gordito, pero sin duda resistente, aguntó toda la caminata casi sin quejarse. A las 7 comenzó a amaneceer, la luz del sol era tan fuerte que estar parado frente a ella tras la ventana me restableció de inmediato (quá cálido).
Luego de un rato, a las 7 y media, salimos los dos con un guía a buscar truchas, para lástima no se hallaban en la parte baja del río por el momento y la ona donde residen está a 15 minutos de caminata cuesta arriba. Yo no quise ir, ni nadie más. Decepcionados volvimos al pueblo, esta vez a la cafetería del pueblo para desayunar, un matecito y dos panes me dejaron satisfecho.
Luego de eso vagué por todo el pueblo mirandolo todo, ver una realidad distinta (no había baños privados, todos eran públicos, bueno, el único y era de mujeres; así que aquí todo el mundo es tu baño). Luego nos reunimos todos y luego de charlar con lugareños preparamos el retor (vaya estadía para corta)...
Ahh que mal plan lo del frío, me choca tenerlo y aparte no dormir... lo bueno es que tuviste quien te abrazara, bueno imagino que así fue... hubieras caminado los 15 min. y no hubieran tenido tal decepción, a eso fueron que no, a difrutar y pasarsela padre... No sé que es un matecito ¿? pero si sé que dos panes es mucho y claro que eres de buen diente ja..ja.... lindo relato, me hace pensar en lo mucho que deseo salir de mi rutina y de esta tristeza que traigo hoy.
ResponderEliminarUn abrazo
Taun
Con matecito me refiero al Mate de coca, una bebida de por aquí, muy buena para el frío.
ResponderEliminarA vale!!! pues tendré que probar una algún día...
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