Vaya basura en la que se ha convertido la sociedad actual. De veras, hoy en día la gente se pelea incluso por cosas triviales ("huevadas", como dicen por el bario); hasta lo más absurdo es motivo de discordia, llegando a los extremos de violencia, división social y discriminación. Un claro ejemplo es la nueva y más reciente víctima de la agresividad deportiva de los "hinchas" del club Universitario de Deportes, Walter Oyarce. ¿Pero en qué demonios estaban pensando? ¿Arrojar a alguien de lo que es como el 3º piso así nomás? (o quizá habrían otros asuntos de por medio, pero nada aparentemente). ¿Y para qué omitir a las demás víctimas de otros tipos de incidentes?: manifestaciones, huelgas (cuyas broncas las ocasiona la policía en la mayoría de los casos), enfrentamientos entre pandillas rivales, peleas callejeras, balaceras... y para esa gente no existen neutrales: o estás con ellos o en su contra (creen que uno va a perder su tiempo en sus jueguitos ¬¬ , pobres ilusos).
En cuanto a todos los planes para solucionar este tipo de asunto, dudo que uno solo se lleve a cabo como hace falta: si lo piensan un poco, es evidente que de la delincuencia y la ignorancia de las grandes masas dependen los bolsillos de las autoridades (realidad que viene desde el extranjero), es gracias a eso que mantienen separada a la gente, por vanidades; es como una segunda Guerra Fría (aunque, bueno, en algunos casos ya ha llevado a pérdidas humanas). Claro, no es muy difícil: le llenas los sesos de porquería a la gente mediante los medios de comunicación, les metes prejuicios absurdos, les enseñas a amar el entretenimiento por sobre todo lo demás, y como cereza al final del postre, un fanatismo que genere disputas entre la gente (por ejemplo, el fútbol); para asegurarse que no se vuelvan a juntar por algún "iluso terrorista", o como llamen a quienes tengan una sugerencia alternativa al sistema actual.
Ni siquiera es asunto sólo del fútbol. Otros deportes, como el baloncesto y el fútbol americano, también presentan este tipo de problemas con el fanatismo. Hasta el tema se escapa de los deportes, para ir a la moda y demás cosas por el estilo. Todo sea por confundir y mantener dividida y distraída a la gente, mientras unos pocos se tiran el festín (vaya vida, ¿eh?).
Ni siquiera es asunto sólo del fútbol. Otros deportes, como el baloncesto y el fútbol americano, también presentan este tipo de problemas con el fanatismo. Hasta el tema se escapa de los deportes, para ir a la moda y demás cosas por el estilo. Todo sea por confundir y mantener dividida y distraída a la gente, mientras unos pocos se tiran el festín (vaya vida, ¿eh?).
Pensándolo así, es fácil entender el porqué de tanta inseguridad y violencia, es lo que todo político busca y necesita para llevar el pan de cada día a su casa.
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